viernes, 28 de diciembre de 2012

Luizo y Luisa


"Para la cuesta arriba quiero mi mulo, que la cuesta abajo yo me la subo".

           En julio pasado fuimos invitados un grupo de amigos, a presenciar en el Parque Natural de Los Alcornocales, en Alcalá de los Gazules, como se realiza la saca del corcho. Fue una experiencia estupenda, porque vimos in situ, todo el proceso desde que se extrae del alcornoque, hasta el transporte y el almacenaje. Finalmente visitamos la suberoteca, centro de calidad del corcho, que guarda 68.000 muestras de más de 1.000 zonas de descorche. 


          De entre el personal que trabajaba en las distintas tareas, llamó nuestra atención un señor que se dedicaba a acarrear el corcho en mulos, desde las zonas más inaccesibles del monte, hasta el rellano al que llegaban los vehículos a motor para continuar con el transporte.  


           Estuvimos hablando con él y nos explicó en que consistía su trabajo, como tenía que equipar a sus mulos, etc, y estando conversando, alguien lo llamó desde lejos... Luizoooo, Luizoooo. Quedamos algo asombrados porque nos parecía raro el nombre, pero pronto nos aclaró que se trataba de un mote, o apodo que había heredado de su padre, y que su verdadero nombre era Juan Manuel Tizón. 


        El apodo se debía, según nos contó, a que en casa de sus ascendientes había un luiso enorme, cosa rara teniendo en cuenta que se trata de un arbusto, y su padre cuando niño tenía por costumbre frecuentar el citado luiso, de tal manera que cada vez que hacía rato que no lo veían, siempre había alguien de la familia que decía: Seguro que está en el luiso, y tanto lo frecuentó que asumió como propio el nombre del arbusto, pasándolo además en herencia a su hijo.

         Pues bien, esta historia de Luizo, como allí le decían, trajo a mi memoria recuerdos de la infancia, porque no había huerta en La Oliva, que no tuviese un luiso. Y tenía su explicación. En primer lugar, porque a los niños pequeños cuando comenzaban a tomar otro alimento diferente a la leche materna, se le daba algo tan exquisito como el migote de luisa, que consistía en una infusión en agua de las hojas de este arbusto, a la que se le añadía migas de pan y azúcar, y en algún caso, también leche. 
         Para los niños, era tal nuestra devoción hacia este manjar, que en muchas ocasiones cuando finalizábamos nuestros juegos infantiles y considerábamos que teníamos algo que celebrar, le pedíamos a nuestras madres que nos preparara un gran migote de luisa para compartirlo con los amigos.


       Esta infusión también era considerada, como un remedio infalible para las molestias gastro-intestinales derivadas de algún exceso con la dieta, y para los dolencias menstruales de las jovencitas. 

 "Está sana y contenta Basilisa porque toma infusión de hierba-luisa, y está gorda y robusta Filomena porque toma a menudo hierba-buena. Esto es prueba patente de que a veces la hierba es conveniente".

        Hace años que no tomo un migote de luisa, pero no me he desvinculado del todo, porque en casa siempre hay hierba luisa para preparar una infusión.


           Hubo una época, en la que tuve por costumbre llevar un poco de luisa al trabajo, y a media mañana preparaba la infusión, y tomaba una taza. Algunas compañeras de la oficina la probaron, y fue tal su agrado, que acabaron demandándome su ración, cada vez que me veían enchufar el hervidor.


Propiedades y Beneficios.

        La Hierba Luisa (Aloysia triphylla, Lippia triphylla, Lippia citriodora), también conocida como Cedrón o Verbena de Indias, es una planta originaria de Sudamérica que puede encontrarse cultivada en muchos jardines y huertos por el aroma a limón de sus hojas y flores y por sus propiedades medicinales.

        Tiene conocidos efectos estimulantes y se viene empleando, desde hace mucho tiempo, para reanimar a las personas que se encuentran más decaídas físicamente, entre otros usos.

En uso interno:

  • muy útil para expulsar los gases del aparato digestivo, evitando las flatulencias y la aerofagia, mediante una infusión digestiva y refrescante.
  • ejerce una función tónico-estomacal, digestiva y tranquilizante, evitando los espasmos y la dispepsia.
  • ayuda a combatir el mal aliento.
  • es muy útil contra las afecciones del aparato respiratorio, especialmente para expulsar las mucosidades, y para la tos.
  • las infusiones de Hierba Luisa relajan y tonifican los nervios.
En uso externo su uso fundamental es como relajante y tonificante de los nervios, añadiendo al agua del baño una infusión de dicha planta.

        Además de sus cualidades medicinales, la Hierba Luisa puede emplearse en la cocina como planta aromática, así como en la elaboración de la famosa Salsa de Hierba Luisa y en cócteles y mezclas de bebidas frías.

        También se utiliza en perfumería, ya que su aceite esencial es muy rico en componentes aromáticos y tiene propiedades bactericidas, por lo que se utiliza en la fabricación de productos de limpieza personal, como jabones, champús, dentífricos, lociones capilares, etc.

viernes, 21 de diciembre de 2012

Tagarninas y cardillos

Tagarninas:

“En la casa que se come cardos, tagarninas y palmitos, no se morirán de hambre, pero tampoco de ahíto”.
 
"Tagarninas de barbecho, quien las come caga afrecho. Una vieja las comió y enteritas las cagó".


        Todos los años, por estas fechas, nacen tagarninas de manera silvestre en la huerta. Las he cogido y en la cocina se han convertido en dos deliciosas comidas. 





          Para cogerlas hay que utilizar guantes, auque hay quien no los usa, porque tienen las manos tan encallecidas que no se pinchan.



        Con un cuchillo las cortamos por la raiz y las vamos depositando en un cesto.


       Para limpiarlas, retiramos de las hojas la parte espinosa y nos quedamos con el nervio principal. Sujetamos la tagarnina con una mano por la parte de la raiz, y con la otra mano, apretamos con los dedos índice y pulgar sobre el nervio principal y deslizamos los dedos desde la base, hasta la punta del tallo, como se aprecia en la siguiente foto.


          Así, hasta pelarlas todas.


         Una vez peladas, las llevamos a la cocina para trocearlas y lavarlas, porque suelen traer tierra del campo.


          Y listas para cocinar. 
 

COMIDA DE TAGARNINAS.
Ingredientes:
§    1 Cebolla
§    5 dientes de ajo.
§    1 Kilo de tagarninas.
§    1 mata de apio.
§    ¼ Kg de alubias.
§    ½ vaso de aceite virgen extra.
§  
   Majado (3 dientes de ajo,2 pimientos secos previamente hervido, 1 cucharada de pimentón y sal). 
Preparación:
1.  En la olla exprés, con agua, colocar las alubias, previamente remojadas, la cebolla y los ajos picados, el aceite, el apio y las tagarninas troceados, de manera que quede cubierto de agua.
2.  Cuando esté hirviendo, añadir el majado.
3.  Cerrar la olla y dejar pitando 30 minutos.
4.  Destapar la olla.
5.  Sacar un poco de caldo y se puede cocer un poco de arroz para los niños y si se quiere se puede añadir las verduras.





REVUELTO DE TAGARNINAS.
Ingredientes:
§    ½ k. de tagarninas.
§    5 dientes de ajo.
§    Aceite.
§    Agua.
§    3 huevos.
§    sal.
Preparación:
1.  En la olla exprés, con agua caliente, colocar las tagarninas después de lavarlas muy bien ya que tienen arena, añadir la sal.


2.  Cerrar la olla y dejar pitando 20 minutos.


3.  Destapar la olla y en un escurridor volcar las tagarninas cocidas.


4.  En una sartén con aceite, poner los ajos picados y cuando se doren volcar las tagarninas y rehogar unos minutos.



5.  Batir los huevos y volcar sobre las tagarninas, mezclar bien el revuelto y rectificar de sal.







Cardillos:

          Las alcachofas del pasado año han rebrotado llenándose de hijos alrededor de la planta antigua.


          He cogido algunos de los más tiernos.


          Y con ellos, en la cocina, Pepi ha hecho la siguente receta.

COMIDA DE CARDILLOS:
Ingredientes:
§    1 Cebolla
§    10 dientes de ajo.
§    1 manojo de cardillos.
§    1 mata de apio.
§    ½ Kg de tagarninas.
§    ¼ Kg de alubias.
§    Pringá (tocino, jarrete y codillo).

§  Majado (3 dientes de ajo,2 pimientos secos previamente hervido, 1 cucharada de pimentón y sal). 

Preparación:
1.  En la olla exprés, con agua, colocar las alubias, previamente remojadas, la pringá, la cebolla y los ajos picados, los cardillos, el apio y las tagarninas troceados, de manera que quede cubierto con el agua.
2.  Cuando esté hirviendo, añadir el majado.
3.  Cerrar la olla y dejar pitando 40 minutos.
4.  Destapar la olla y sacar la pringá.



5.  En este momento, en un poco de caldo se puede preparar un arroz para los niños y si se quiere se puede añadir las verduras.




viernes, 7 de diciembre de 2012

Los Navazos de Sanlúcar de Barrameda

Huerta sin agua, por barata que sea, es cara.

El labrador siempre está llorando o por duro o por blando. 

A planta sembrada, planta regada.

Huertas y Mujeres, cuidado continuo requieren.

Huerta sin agua y Mujer sin Amor, no sé que será peor.



        Antonio Reyes  (Concejal de Turismo del Ayto. de Sanlúcar), y nuestros amigos del blog Tubal (www.tubal.blogspot.com), Juan Antonio Mena y Pilar Acuaviva, han tenido la gentileza de invitarnos a una reunión de blogueros en Sanlúcar de Barrameda.
       El objeto de la reunión era conocer un sistema de cultivo muy peculiar, que se desarrolla en los arenales cercanos a la playa, comprendidos entre dos dunas, que se denominan navazos.
          El paso de un barco por la desembocadura del Guadalquivir camino de Sevilla, nos permite apreciar la cercanía del navazo al mar.
 
          La peculiaridad de este cultivo radica principalmente en que permite el riego por ascenso del agua, debido a la propiedad de capilaridad de la arena, ayudado por el flujo de mareas.


        Aunque en la actualidad también se emplea riego por goteo según nos informó D. Luís Ibáñez, agricultor del Navazo de San Salvador.
      El navacero ha tenido que realizar una serie de labores de acondicionamiento, excavando el terreno con la ayuda de animales de tiro, apartando arenas en los bardos, etc. El terreno de labor se divide en cuarteladas a las que se desciende por un portillo, y en varias de estas se ha excavado un tollo o pozo en forma cónica, en que desembocan las gavias o canalillos de drenajes.


        En la antigüedad para permitir el riego autónomo lo que se hacía es trabajar la tierra dando mucha labor, es decir profundizando mucho con la azada, para que la tierra suelta facilitara el enraizamiento de las plantas y que estas buscaran el jugo con raices largas, lo que se conseguía regando diariamente planta a planta, con jarras desde el pozo hasta que las raices llegaran a la capa freática. Afortunadamente en la actualidad se utilizan motores para el riego.


        El navazo presenta una serie de propiedades que recuerda, las  de un invernadero. La arena del suelo se calienta, y al estar protegido por las dunas laterales o bardos crea un microclima caracterizado por la elevada humedad en el ambiente por la proximidad al mar y también a la capa freática. Esto ha permitido que los navazos sean ideales para el cultivo de hortalizas tempranas de gran calidad y variedad.
 Coliflores

 Habas
 Puerros
 Chícharos (Guisantes)
 Almáciga de lechugas

     El Ingeniero Técnico Agrícola D. Rubén Sánchez Cáceres,   nos acompañó a la zona de Bonanza, al navazo de San Salvador, para explicarnos la importancia de este patrimonio rural.


     Nos dijo que el navazo es un sistema tradicional y casi exclusivo de Sanlúcar. La palabra navazo, etimológicamente proviene del vocablo árabe “nevaa” que significa manar agua, dado que el aporte hídrico no se realiza con el riego, sino aprovechando que la arena facilita la propiedad física del agua de ascender por capilaridad, con lo que cada 12 horas, aprovechando las mareas, se produce el riego.

      Pero desgraciadamente los navazos están en peligro debido a su principal enemigo: la expeculación urbanística. Esperemos que con la caída de la demanda inmobiliaria este peligro se atenúe.
      La Asociación de Consumidores y Productores de Agricultura ecológica de Sanlúcar de Barrameda “La Borraja”, y Ecologistas en Acción, han reivindicado su protección, incluyéndolos en el Plan General de Ordenación Urbana y el Plan de Ordenación Territorial y proponiendo fórmulas de uso como la de “huertos sociales” y poniendo en valor a un Patrimonio rural en peligro.

      A continuación pongo los audios de las explicaciones que nos dio Ruben.

miércoles, 5 de diciembre de 2012

Granada madura, tentación segura

"Por Santiago y Santa Ana, pintan las uvas y las granadas"



La granada es como un seno

viejo y apergaminado,

cuyo pezón se hizo estrella

para iluminar el campo.



  • Según la mitología griega, el primer granado fue plantado por Afrodita, la diosa griega del amor y de la belleza, mientras que el dios del infierno Hades, le ofreció su fruto a la bella Perséfone para seducirla.
  • En Java, está asociada a ciertos ritos que acompañan el embarazo.
  • Según Shakespeare, bajo su follaje se ocultó Romeo para cantarle una serenata a Julieta.
  • En China, se tiene la costumbre de ofrecerle una granada a los recién casados como auspicio de una descendencia numerosa (el color rojo de esta fruta es considerado por la tradición china un color que atrae la buena fortuna).
  • En el Islam se considera uno de los árboles del Paraíso, conforme a referencias coránicas y de las tradiciones del profeta Muhammad o Mahoma

  ¿Como se parte una granada para comerla?.

        En primer lugar he de decir, que desde mi punto de vista, lo mejor es comerla en el momento en que se coge del árbol, porque conserva todas su cualidades y sabor.
         Para partir la granada, solamente necesitamos un cuchillo o una navaja, tan útiles en el campo, y procedemos de la siguiente manera:

          Le quitamos el cáliz.


          Para lo cual, hacemos tres o cuatro cortes alrededor, como se muestra en las fotografías.


         Con la punta del cuchillo retiramos el cáliz.


        Ahora se puede apreciar la lámina blanca que separa los gajos.


                Hacemos un corte que coincida con cada lámina blanca.



          Hasta que quede como se aprecia en la foto siguiente.



          A continuación separamos los gajos.




          Cogemos cada uno de los gajos, y listos para comer.

          Recuerdo que nosotros de niños, a los gajos  le llamábamos gallitos, tal vez por su parecido con la cresta del gallo.




          Si queremos ponerlos en la mesa, como postre, le quitamos las láminas blancas y colocamos los gallitos en un plato.





        Aunque para mi lo mejor es comerla directamente de los gajoshay quien los desgrana en un plato y le pone azúcar por encima. También está muy buena añadiendo los granos a la ensalada.



MEMBRILLO CON SALSA DE GRANADAS.

            Del recetario de la España del siglo XV, en la cocina sefardí hacían una receta parecida.
            Por aquel entonces le llamaban “Letuario de bimbrillo”.
         Ana Bensadon, descendiente de los sefardíes recupera esta sabiduría antigua que es el origen de muchos platos actuales de nuestras cocinas. Es una curiosidad conocer la procedencia de las recetas que hacemos. Tiene un libro de recetas “Dulce lo vivas: repostería sefardí” Esta receta que os trasmito es una modificación a la que se añade salsa de granadas.

            Los ingredientes para cuatro personas son:

                        2 ó 3 membrillos
                        220  gr. de  azúcar (ya sabéis que le podéis poner menos)
                        300 ml de agua
                        1 rama de canela
                        6 clavos de olor.

            Para la salsa de granadas:

                        3 granadas
                        80 gr. de azúcar
                        1 copita de vino de oporto o de moscatel.

            La forma de hacerlo es:

1-      Pela los membrillos, córtalos a cascos y frótalos con limón para que no se pongan oscuros.
2-    Vierte el agua en la cazuela y añade el azúcar, los clavos, la canela y los membrillos. Deja que cueza a fuego medio hasta que estén blandos. Retíralo del fuego y deja que se enfríe en el líquido de cocción.
3-      Entretanto pela las granadas y pasa por un chino o un pasapurés los granos para sacarle el jugo, pero reserva los granos de una de las granadas para decorar el postre.
4-    El jugo de la granada ponlo en un recipiente junto con el vino y el azúcar y deja que cueza a fuego suave.
5-     Coloca el membrillo escurrido de su agua de hervir en un recipiente bonito, lo riegas con la salsa de granada y le pones por encima los granos reservados.




Ahora un poco de historia

      El granado es un árbol originario de la región que abarca desde Irán hasta el norte de los Himalayas en India, y fue cultivado y naturalizado en toda la región del Mediterráneo incluida Armenia, desde la Antigüedad. Muy apreciado en las zonas desérticas, ya que esta protegido de la desecación por su piel gruesa y coriácea, lo que permitía que las caravanas pudieran transportar su fruta grandes distancias, conservando sus apreciadas cualidades. Testimonios de su consumo se recogen en todos los documentos antiguos. 

       Se sabe del cultivo de la granada, desde hace al menos 5.000 años en Asia occidental y en el Norte de África; se plantaba en los jardines colgantes de Babilonia y se encuentra esculpido en los bajorrelieves egipcios. Los antiguos egipcios preparaban con su jugo un vino ligero con sabor a frambuesa.
        Hipócrates recomendaba el jugo de la granada contra la fiebre y como fortificante contra la enfermedad.
         Los romanos conocieron la granada gracias a los fenicios que la trajeron de Fenicia (aproximadamente en el actual Líbano) a Roma, de ahí su nombre científico de Punica.
       La Biblia hace referencia en numerosas ocasiones a este fruto, y siempre en su defensa.


         Son los bereberes quienes traen la fruta a Europa, y la ciudad de Granada, fundada en el siglo X, recibió su nombre por esta fruta.
Muchos pueblos han visto la granada como un símbolo de amor, de fertilidad y prosperidad.