La granada es como un seno
viejo y apergaminado,
cuyo pezón se hizo estrella
para iluminar el campo.
viejo y apergaminado,
cuyo pezón se hizo estrella
para iluminar el campo.
- Según la mitología griega, el primer granado fue plantado por Afrodita, la diosa griega del amor y de la belleza, mientras que el dios del infierno Hades, le ofreció su fruto a la bella Perséfone para seducirla.
- En Java, está asociada a ciertos ritos que acompañan el embarazo.
- Según Shakespeare, bajo su follaje se ocultó Romeo para cantarle una serenata a Julieta.
- En China, se tiene la costumbre de ofrecerle una granada a los recién casados como auspicio de una descendencia numerosa (el color rojo de esta fruta es considerado por la tradición china un color que atrae la buena fortuna).
- En el Islam se considera uno de los árboles del Paraíso, conforme a referencias coránicas y de las tradiciones del profeta Muhammad o Mahoma
¿Como se parte una granada para comerla?.
En primer lugar he de decir, que desde mi punto de vista, lo mejor es comerla en el momento en que se coge del árbol, porque conserva todas su cualidades y sabor.
Para partir la granada, solamente necesitamos un cuchillo o una navaja, tan útiles en el campo, y procedemos de la siguiente manera:
Le quitamos el cáliz.
Para lo cual, hacemos tres o cuatro cortes alrededor, como se muestra en las fotografías.
Con la punta del cuchillo retiramos el cáliz.
Ahora se puede apreciar la lámina blanca que separa los gajos.
Hacemos un corte que coincida con cada lámina blanca.
Hasta que quede como se aprecia en la foto siguiente.
A continuación separamos los gajos.
Cogemos cada uno de los gajos, y listos para comer.
Recuerdo que nosotros de niños, a los gajos le llamábamos gallitos, tal vez por su parecido con la cresta del gallo.
Si queremos ponerlos en la mesa, como postre, le quitamos las láminas blancas y colocamos los gallitos en un plato.
Aunque para mi lo mejor es comerla directamente de los gajos, hay quien los desgrana en un plato y le pone azúcar por encima. También está muy buena añadiendo los granos a la ensalada.
MEMBRILLO
CON SALSA DE GRANADAS.
Del recetario de la España del siglo
XV, en la cocina sefardí hacían una receta
parecida.
Por aquel entonces le llamaban “Letuario
de bimbrillo”.
Ana Bensadon, descendiente de los sefardíes
recupera esta sabiduría antigua que es el origen de muchos platos actuales de nuestras
cocinas. Es una curiosidad conocer la procedencia de las recetas que hacemos. Tiene
un libro de recetas “Dulce lo vivas: repostería sefardí” Esta receta que os trasmito es una modificación a la que se añade
salsa de granadas.
Los ingredientes para cuatro personas
son:
2 ó 3 membrillos
220 gr. de
azúcar (ya sabéis que le podéis poner menos)
300 ml de agua
1 rama de canela
6 clavos de olor.
Para la salsa de granadas:
3 granadas
80 gr. de azúcar
1 copita de vino de oporto
o de moscatel.
La forma de hacerlo es:
1- Pela los membrillos, córtalos a cascos
y frótalos con limón para que no se pongan oscuros.
2- Vierte el agua en la cazuela y añade
el azúcar, los clavos, la canela y los
membrillos. Deja que cueza a fuego medio hasta que estén blandos. Retíralo del fuego
y deja que se enfríe en el líquido de cocción.
3- Entretanto pela las granadas y pasa por
un chino o un pasapurés los granos para sacarle el jugo, pero reserva los granos
de una de las granadas para decorar el postre.
4- El jugo de la granada ponlo en un recipiente junto con el vino y el azúcar y deja que cueza a fuego suave.
5- Coloca el membrillo escurrido de su agua
de hervir en un recipiente bonito, lo riegas con la salsa de granada y le pones
por encima los granos reservados.
Ahora un poco de historia
El granado es un árbol originario de la región que abarca desde Irán hasta el norte de los Himalayas en India, y fue cultivado y naturalizado en toda la región del Mediterráneo incluida Armenia, desde la Antigüedad. Muy apreciado en las zonas desérticas, ya que esta protegido de la desecación por su piel gruesa y coriácea, lo que permitía que las caravanas pudieran transportar su fruta grandes distancias, conservando sus apreciadas cualidades. Testimonios de su consumo se recogen en todos los documentos antiguos.
Hipócrates recomendaba el jugo de la granada contra la fiebre y como fortificante contra la enfermedad.
Los romanos conocieron la granada gracias a los fenicios que la trajeron de Fenicia (aproximadamente en el actual Líbano) a Roma, de ahí su nombre científico de Punica.
La Biblia hace referencia en numerosas ocasiones a este fruto, y siempre en su defensa.
Son los bereberes quienes traen la fruta a Europa, y la ciudad de Granada, fundada en el siglo X, recibió su nombre por esta fruta.
Muchos pueblos han visto la granada como un símbolo de amor, de fertilidad y prosperidad.
Excelente post sobre granadas!!!
ResponderEliminarYa lo dice el refrán:
"...a la cama no te irás sin saber una cosa más..."
Hoy he aprendido a preparar las granadas de una manera que estoy segura que dá muy buenos resultados.
¡¡¡Eso de los "gallitos" es una muy buena idea!!!
Gracias.
Un abrazo desde EL TERRAO.
Pues la idea me vino cuando leí en tu blog como haces para sacar los granos golpeando con la cuchara. Pensé que podía ser útil dar a conocer como lo hacemos nosotros. Me alegro que te guste
EliminarUn abrazo.