"Para ser Virgen Extra, del olivo a la prensa"
Para cualquier persona a la que le guste el campo tanto como a nosotros, tener la posibilidad de pasar una jornada entre olivares es algo maravilloso.
Y ha sido posible gracias a que la empresa, El Jardín de Almayate, que cultiva 700 hectáreas de de Olivo en la finca Ranchiles de Jerez, nos invitó a través de Don Javier Ciezar, de la empresa Probando Probando, para que conociésemos el proceso de recogida de la aceituna, traslado a la almazara y transformación en aceite de oliva virgen extra.
La empresa es propiedad de la familia Muñoz Toledo, que posee además otras explotaciones agrícolas de cítricos, hortícolas, forrajeras y tropicales.
Durante la visita estuvimos acompañados por la señorita Lara Muñoz, propietaria de la empresa, y el director General de la misma don José María Criado.
Comenzamos la visita con un desayuno en el que pudimos probar el aceite "Alma de Jerez" surgido de este olivar y que en breve saldrá al mercado.
Para desplazarnos a la zona del olivar, en el que se estaba recolectando las aceitunas, subimos a un remolque tirado por un tractor.
Los olivos son de la variedad arbequina que es la que mejor se adapta al cultivo superintensivo. Están sembrados en hileras de olivos separadas 4 metros y de un olivo a otro hay una separación de metro y medio. Esta configuración, unida a que los olivos no alcanzan gran tamaño, facilita la recolección mecanizada.
De cada líneo de olivos la máquina recoge unos 1500 Kg. Como hace un líneo a la ida y otro a la vuelta, regresa con 3000 Kg de aceitunas y los descarga en un remolque.
Una vez completado el remolque, se desplaza hasta la almazara, situada en la misma finca, para descargar en las tolvas.
Terminada la descarga, un complejo entramado de cintas transportadoras, hacen pasar a las aceitunas por diferentes mecanismos, encargados de separar las pequeñas ramas y hojas que vienen mezcladas. A continuación se someten a lavado, y ya en óptimas condiciones pasan a la trituradora y a la prensa que extraerá el zumo.
En estos momentos contemplamos, convertidas en aceite, las aceitunas que hace unas tres horas hemos visto recoger de los olivos.
Después de todo el proceso que acabamos de contemplar podemos asegurar que el aceite "Alma de Jerez" cumple todos los requisitos para ser considerado de máxima calidad.
La alta calidad del aceite "Alma de Jerez" le han hecho merecedores de premios en Estados Unidos, China y Japón.